comenzó la segunda etapa del plan de estabilización del Gobierno, cuyo objetivo es eliminar casi toda fuente de emisión monetaria. Este lunes, los bancos se reunieron con el equipo económico para discutir las Letras de Regulación Monetaria (LRM) que sustituirán a los pases. Esta noticia tuvo un impacto negativo en los mercados: el dólar blue y los financieros registraron fuertes alzas, mientras que las acciones cayeron hasta un 9% en el exterior.

La primera reacción se produjo tras la conferencia del ministro de Economía, Luis Caputo, el pasado viernes, cuyo objetivo era «bajar la ansiedad» sobre la salida del cepo cambiario. Aunque no se anunció una fecha concreta, Caputo adelantó que esa será la tercera fase del plan de estabilización.

Sin embargo, no hubo definiciones sobre novedades en la política cambiaria. Caputo afirmó que el tipo de cambio oficial mayorista seguirá devaluándose a un ritmo del 2% mensual, a pesar de las crecientes dudas sobre la sostenibilidad de este programa. También insistió en que se mantendrá el dólar blend exportador, que permite a los exportadores liquidar un 20% al financiero y 80% al oficial, aunque el Banco Central terminó junio con un saldo negativo en sus reservas bajo la administración de Javier Milei.

En este contexto, el dólar blue se vendió a $1405 en la City porteña, alcanzando su cotización nominal más alta. Esto representó una suba de $40 frente al cierre anterior (+2,9%), acumulando un aumento de $140 en junio (+11,4%).

“El Banco Central exageró con la baja de tasas de interés en mayo. Desde entonces, se produjo un desanclaje monetario, el mercado cerró todo carry trade, se dolarizó y las cotizaciones se dispararon. No es fácil desdolarizar, incluso con la ley Bases en vigor. Por eso, el Ministerio de Economía quiere avanzar con la fase dos del programa y el Banco Central busca recuperar la tasa de interés como un instrumento clave de política monetaria. Cuando suben las tasas de interés, también aumenta la emisión endógena porque hay que remunerar los pasivos monetarios. Por eso, Caputo anunció que la deuda se transferirá al Tesoro”, explicó Fernando Camusso, director de Rafaela Capital.

Los tipos de cambio financieros también subieron y rompieron récords nominales, a pesar de la oferta proveniente de las liquidaciones de los exportadores. El dólar MEP cerró a $1413,01, un avance diario de $65,05 (+4,8%). El contado con liquidación (CCL) finalizó en $1412,48, $62,3 más que el viernes (+4,6%).

“Hace un mes que el mercado financiero está muy débil. Entre las incertidumbres por la ley Bases, la baja de tasas de interés y un contexto internacional desfavorable, los bonos y acciones han caído y los dólares han subido. El anuncio del viernes generó más preocupación, demostrando que el equipo económico está más enfocado en resolver el tema monetario que el cambiario. Esto generó inquietud entre los inversores, ya que el foco está en la venta de reservas del Banco Central. Se avecinan meses en los que no podrá comprar muchos dólares y el próximo año enfrenta importantes vencimientos de deuda. El mercado está más interesado en cómo Argentina saldrá del cepo cambiario que en las medidas fiscales y monetarias, que sabemos que son efectivas”, comentó Fernando Marull, economista de FMyA.

Este lunes, el tipo de cambio oficial mayorista cotizó a $914,50, una microdevaluación de $2,50 frente al cierre anterior (+0,3%), compensando la inactividad del fin de semana. La brecha con el contado con liquidación se amplió a 54,5%.

“El mercado muestra menos confianza en la sostenibilidad del esquema actual, influido por la posición vendedora del Banco Central en el MULC [aunque hoy compró US$50 millones]. Esto puede generar problemas en la economía real, debido a la especulación y las expectativas de un ajuste en la cotización del dólar mayorista. La aprobación de la ley Bases modificada en Diputados no parece haber mitigado la inquietud del mercado”, indicaron analistas de la consultora económica LCG.

Bonos y acciones La Bolsa porteña cerró la semana con una caída del 1%. En el panel principal, conformado por las compañías con mayor volumen de operaciones, los papeles más golpeados fueron los bancarios: Banco Supervielle (-6,5%), Banco Macro (-5,5%), BBVA (-4,8%) y Grupo Financiero Galicia (-4,4%).

Las acciones argentinas que cotizan en Wall Street (ADR) también mostraron números en rojo. Los papeles del Banco Supervielle retrocedieron 9,7%, seguidos por Grupo Financiero Galicia (-9,5%), Edenor (-8,7%) y Banco Macro (-7,5%).

Los bonos del último canje de deuda operaron en terreno negativo en todas sus legislaciones y vencimientos. Los Bonares cayeron 4,81% (AL41D) y los Globales hasta 4,05% (GD46D). Esto impactó en el riesgo país, que avanzó 57 unidades, situándose en 1513 puntos básicos (+3,9%).

“Con el anuncio del viernes, el esfuerzo fiscal del Tesoro será mayor, por lo que no es sorprendente que hoy caigan los bonos en dólares. El mercado evaluará si este esfuerzo fiscal es viable, a pesar de que en los primeros seis meses hubo déficit cero y el Gobierno está comprometido con alcanzar superávit. En el corto plazo, el driver no es la ley Bases, sino la entrada genuina de dólares. En un momento en el que el Banco Central vende más divisas de las que compra, la llegada de dólares podría calmar a los inversores en los próximos días”, concluyó Camusso.